Tanta propaganda por el voto útil me hastía. El único voto útil es el que se respeta una vez depositado por el ciudadano. Más les valdría buscar un sistema de reparto de escaños más justo y equilibrado en el que cada voto sume lo mismo y que cada diputado estuviera soportado por el mismo número de electores. Pero la justicia de reparto no es lo que buscan los partidos políticos, sino aquélla que más les favorezca.

Si de verdad amas a España tu único camino es votar a VOX. Santiago Abascal representa para mí el tipo de hombre que puede liderar una España de futuro, con valores y principios claros y con la fortaleza y convicción de cumplir la ley y velar por la justicia, renovando la mentalidad de la clase política. Hay otros muchos como él, estoy convencido, pero escondidos en las trincheras luchando con sus miedos y sin energía para parar esta corrupción de los valores. UPyD aunque me pese era, por la izquierda, la única opción válida de futuro de contrapeso. Esta conclusión me hace caer en la cuenta de que realmente pertenezco a la minoría y no tendré representantes el próximo 26J dominadas por los 4 jinetes de la apocalipsis. Recientemente escribí otras reflexiones demandando una acuerdo tripartito, PP, PSOE y CIUDADANOS como la mejor opción para España, pero sus comportamientos posteriores reflejan la falta de interés por el futuro de los españoles y que sus objetivos son mantener, ganar, no perder, probar… el néctar del poder.

Todos estos, nuestros representantes, han petrificado el podium de sus privilegios y se justifican unos a otros sin remedio. Por eso mi reflexión va en la línea de identificar aquéllos valores y condiciones que son necesarios para un país en progreso.

Libertad individual de la persona


Como principio básico e irrenuciable, por encima de cualquier otra condición o valor, la libertad es el sustrato sobre el que se debe construir una nación. Sin ella, cualquier acción se convierte en concesión y por tanto apunta a privilegios y diferenciaciones entre las personas.

Está claro que quedan fuera de juego todas las formaciones totalitarias como UNIDOS PODEMOS y que pretendan conseguir igualdades relativas pisando la libertada individual de la persona.

Unidad de España



Es la primera y básica -cumpliendo la condición de libertad individual- de todas porque implica igualdad de derechos y obligaciones para todos los españoles sin distinción. Aunque parece que los constitucionalistas con representación parlamentaria lo suscriben yo no estoy tan convencido cuando mantienen las autonomías que son el foco de ruptura que usan los separatistas. Lo malo es que los que nos han gobernado lo han mantenido y alimentado como soporte a su poder y el que viene arrastra dejes parecidos a sus hermanos mayores. VOX proclama el cierre de esta oficina de desigualdades y establecer educación, sanidad y justicia únicas e iguales para todos los españoles.

Otra tara que arrastramos con estos políticos del poder es la rendición ante el terrorismo. Les han aupado a las instituciones y cobran por ello. El sufrimiento y resistencia de las víctimas han sido traicionados por PP y PSOE. Han claudicado y comprado la finalización de asesinatos concediéndoles sus reivindicaciones de representatividad en las instituciones. Fruto de estas acciones alimentan el nacimiento del separatismo y la violación de la ley. Los terroristas y otros separatistas saben que estos gobernantes ceden ante la presión de la violencia y son apoyados por la nueva oleada de educandos en estos sistemas de antieducación implantados en varias autonomías.

Libertad de Educación

Basta ya de robarnos a los padres el derecho a educar a nuestros hijos según nuestras creencias y principios. Los políticos no pueden seguir forzando y privilegiando la educación pública contra la concertada. Su obligación es definir escenarios únicos formativos, los programas y los niveles a superar para titular, promover una educación pública de calidad y dotar de medios y becas a aquellos alumnos brillantes con dificultades económicas. La elección del centro debe ser de los padres y los medios económicos calculados por alumno y no por tipo de educación elegida Cheque escolar ya.

Suprimir las competencias educativas a las autonomías en cuanto a definición y unificar un plan educativo nacional despolitizado es fundamental para que nuestros hijos sean competitivos en un mundo cada vez más globalizado. Volver a poner al maestro en el lugar preponderante que le toca en la educación, exigiéndole una formación y actualización continua, premiando la excelencia, mejorando el sistema retributivo, implantando el respeto mutuo pero distinguiendo entre la autoridad y disciplina requeridas entre educadores y educandos, premiar el estudio y el esfuerzo, promover la excelencia y abrir itinerarios alternativos dignos para otras preferencias al estudio formal con una formación profesional orientada a una incorporación al mundo laboral más temprana deben ser prioridades del gobierno elegido.

Por favor, que se acabe ya la educación del odio al diferente, que termine la manipulación ideológica en la escuela, que se rompan los programas tendenciosos y sesgados y que busquemos la formación de hombres y mujeres equilibrados, pasionales y respetuosos con los demás pero con principios y referencias claras. Forjar personas con carácter y bien preparadas que sean capaces de dirigir el mundo que recibirán de sus mayores siendo sensibles a las desigualdades y dificultades de los menos agraciados y afortunados.

Separación de poderes

Parece mentira que haya que recordar esta norma básica para que un sistema democrático funcione, pero España no cumple esta regla. Los partidos políticos hegemónicos hasta ahora no han corregido esta tara. Al contrario, su empeño ha sido en dominar el legislativo comprando estabilidad a los separatistas y el judicial nombrando ellos los órganos de gobierno y favoreciendo las tendencias que representan entre los jueces y sus organizaciones. Y el cuarto poder, la prensa y medios de comunicación, también lo han controlado a través de licencias sesgadas, televisiones autonómicas al servicio de cada gobierno y repartiendo el espectro de ondas de manera poco abierta y menos aún competitiva en igualdad de condiciones.

Algunos que vienen quieren controlar más aún a los medios y eliminar cualquier crítica o idea contraria a sus intereses.

El poder legislativo además está rompiendo las reglas de las mayorías otorgadas por los ciudadanos y pervierten el sentido del voto a su capricho. No se puede aceptar como democrática la idea de que los perdedores se alíen en contra del dictado de las urnas. Es una violación flagrante de la voluntad del pueblo.

Fin a los privilegios

En este apartado cabe incluir muchos conceptos de gasto excesivo del estado que suponen un privilegio para lobbys, sindicatos, partidos políticos, patronales, empresas públicas que están dotadas con presupuestos inadmisibles. sindicatos y patronales deben sostenerse con las cuotas de sus afiliados y sacadas del presupuesto nacional. Los partidos políticos deben mantenerse con lo imprescindible para sostener una infraestructura sobria sin excesos. Empresas públicas creadas para meter a todos sus enchufados y que ademas hacen competencia desleal al sector privado en proyectos diversos deben desaparecer. Autonomías que son una fuente de gasto inagotable, mal gestionadas y al servicio del gobierno de turno en muchos casos frente al interés general, y duplicando el funcionariado requerido para cubrir los servicios deben racionalizarse. Las televisiones autonómicas que no cumplen el servicio al ciudadano que son pérdidas continuas al servicio de los partidos de gobierno y que no justifican el interés general.

Y el estado del bienestar… debemos replantearnos qué nivel del mismo nos podemos permitir, porque con la escusa de estos servicios universales la subida de impuestos no tiene límite. Se deberán mantener los servicios de educación y sanidad que el país esté dispuesto a pagar, pero sin endiosar su magnitud. Está demostrado, por ejemplo, que cuando las medicinas son casi gratis la población abusa del uso y despilfarra este privilegio. Hay que cubrir sin duda la medicación de muchos pacientes permanentes con tratamientos de alto coste, pero se debe también concienciar al ciudadano de contribuir a pagar esta deuda cuando puede hacerlo. Si los impuestos son muy altos y además progresivos es muy difícil la solidaridad porque el estado se encarga de gravar a su criterio.

Economía de mercado

Claramente debemos huir del intervencionismo, de la presencia del estado en los ámbitos de creación de empleo; su labor es favorecer la legislación a empresarios y emprendedores que son los que generan riqueza y empleo. Esta variable la pongo la última porque son mucho más importantes los principios y reglas del juego que la parte monetaria. Ésta no llegará si no se garantizan y favorecen los anteriores.

No creo en medidas similares al Plan E de Zapatero que es puro gasto que desaparece sin crecimiento. La principal fuente de ingresos para el estado viene de los trabajadores, en su doble aspecto de rendimientos del trabajo y consumo. El estado debe luchar por aumentar el líquido en el bolsillo del contribuyente y recaudar a través de impuestos como el IVA y no ahogarnos con altos porcentajes de retención en el IRPF. La mejor política social es que los ciudadanos y los generadores de empleo tengan un sistema de libre competencia y lejos del estado que sólo debe velar por el cumplimiento de la ley.

¿Quién se preocupa por los autónomos y emprendedores que inician una actividad intentando mantenerse y dar trabajo a otros? Hasta ahora, nadie. Cobrar de la SS y de las facturas aunque no haya beneficios o las facturas no se paguen o se paguen a 180 días o más no se tiene en cuenta en Hacienda; y además no hay prestaciones por desempleo si tu intento de crear actividad económica fracasa. Esta ceguera debe desaparecer y ver al empresario como generador de riqueza y empleo en vez de mirarle como explotador de trabajadores. Y sí, creo que el que arriesga su dinero debe ganar mucho más que el que no arriesga su patrimonio nunca. Muchas veces no tienen éxito y el empresario tiene que afrontar créditos y pérdidas por su fracaso; en cambio el trabajador, efectivamente perderá su empleo pero pasa a cobrar paro y no tiene que asumir otras pérdidas. ¿No es justo que en el éxito gane 10 veces más que sus empleados?

Como resumen final os copio mi tabla de resultados valorando en cada criterio a los distintos partidos políticos litigantes: